Alcazarquivir es una ciudad del Norte de Marruecos, provincia de Tetuán. La población de Alcazarquivir es de 73.541 habitantes. Derrota de los portugueses y la muerte de su rey don Sebastián (1578) por los marroquíes. Alcazarquivir también es llamada Ksar-el-Kébir (en árabe).
Las coordenadas de Alcazarquivir son 35°00′N 5°54′O. Las antípodas de Alcazarquivir se encuentran en Nueva Zelanda, la ciudad más próxima es Purerua a 17 Km.
Historia de Alcazarquivir
La ciudad se encuentra en la llanura de Gharb. El río Lucus pasa a pocos kilómetros del centro urbano. Cerca se encuentra el lago artificial Makhazine, uno de los más grandes de Marruecos que ha evitado las inundaciones históricas y fomenta el riego.
Es una ciudad de origen romano en donde aún quedan ruinas. Sirvió como área de tránsito para los almohades en la época musulmana y también como base para combatir a los europeos en la costa.
En sus alrededores se llevó a cabo la Batalla de Alcazarquivir o la Batalla de Oued al-Makhazine, el 4 de agosto de 1578. Esta batalla fue importante para el reino de Portugal que se volvió dependiente de España y puso fin a los intentos de conquistar Europa en Marruecos.
La ciudad fue parte del antiguo Marruecos español hasta su independencia en 1956.
Pertenecía al protectorado español de Marruecos porque fue la sede de una gran guarnición militar. Después de la independencia se convirtió en un centro agrícola y la producción de caña de azúcar, así como de remolacha azucarera.
Batalla de Alcazarquivir
El 4 de agosto de 1578, el rey de Portugal Sebastian I de Portugal se alió con Mohamed al-Moutawakil, ex rey y pretendiente al trono de Marruecos para derrocar al sultán de Marruecos. Los 50.000 jinetes del sultán aniquilaron a las tropas ibéricas. Abd al-Malik, Mohamed al-Mutawakil y Sebastian fueron asesinados.
La leyenda dice que el cuerpo del rey de Portugal nunca se encontró, a pesar de los textos de la época que mencionan expresamente su descubrimiento y entierro. Felipe II de España toma posesión de Portugal, mientras que el hermano del sultán Ahmed al-Mansur Saadi ascendió al trono de Sherifian.
Visitar la ciudad
La estructura del casco antiguo está formada por los distritos de Bad el Oued, el más antiguo y comercial con su Alcaicería y el de Xerea al norte. El zoco de Sidi Bu Hamed es el vínculo entre los dos.
Bad El Oued
No siendo declarada como medina histórica, la ciudad se modernizó por la construcción de nuevos edificios y estructuras que mejoraron las antiguas mezquitas y zaouias.
La Gran Mezquita es un sitio de interés: ubicada en Bad el Oued y de origen almohade (siglo XII), tiene un minarete construido con piedras romanas y bizantinas. Tiene un gran patio y una hermosa medersa (escuela religiosa).
Junto a la Gran Mezquita encontramos la Kasbah de Gailan muy transformada.
También es interesante visitar el antiguo barrio judío
Varios lugares que vale la pena visitar: la casa de Rmiki, con sus hermosos techos y jardines, la zaouia de Sidi Kacen, las marabotas de Sidi Rais, Abh-Allah Ben Mohamed, Lalla Fatma Andalusiya, la Alcaicería, las Mezquitas, Saida, con su bella arquitectura andaluza y Hacemiri, una antigua zaouia transformada en mezquita en 1889. También contiene los restos de su antiguo mercado y la importante artesanía textil con djellabas. De lo que queda de la muralla almohade, destaca el minarete Al Banat y el Borj Belabbes.
Xerea
Barrio más moderno que el anterior. Podemos observar:
- El Santuario de Sidi Bu Hamed, en el centro de la medina.
- La mezquita de Sidi Yacob, con sus palmeras, que constituye uno de los complejos monumentales más bellos de la ciudad.
Fuera de la medina
A la entrada de la ciudad encontramos el cementerio musulmán con el santuario de Sidi Bougalet, patrón de la ciudad, decorado con un bonito patio y una fuente, obra del pintor español Bertuchi.
El antiguo cuartel general de las tropas, una verdadera ciudad militar española, es el ejemplo neo-nazarí más importante del protectorado. Debemos visitar la Sala de las Banderas, el poste y el pabellón de mando con la Torre del Reloj que se parece a la Torre Dorada de Sevilla y sus puertas monumentales.
Desde la era española, también podemos admirar la Iglesia del Sagrado Corazón, ahora centro social de las Hijas de la Caridad, con su hermosa fachada y su amplia torre. El hotel español, el ayuntamiento, el grupo escolar español y el edificio de intervención neocolonial también merecen una visita.
