París es un destino rico en historia y cultura, una ciudad ideal para ser visitada durante un fin de semana. La Torre Eiffel, el Museo del Louvre y los Campos Elíseos son algunas de las maravillas que podrás descubrir. Un solo día no es suficiente para recorrer la ciudad, como mínimo intenta planificar tu viaje con dos días en París. Para facilitarte el trabajo, hemos preparado una guía de un fin de semana, con los lugares más destacados que no te puedes perder.

Lo primero de todo, ¿cómo llegar a París? una forma cómoda de viajar a París es utilizando el tren desde Barcelona. La duración es de tan solo 4 horas, puedes comenzar el viaje un viernes y viajar desde París a Barcelona en tren de vuelta el domingo.

Día 1 en París

El Arco del Triunfo es lo primero que debes visitar en la Plaza Charles de Gaulle. Este monumento nacional fue construido durante el reinado de Napoleón I con el objetivo de perpetuar la memoria de las victorias del ejército francés. Alberga la tumba del Soldado Desconocido de la Primera Guerra Mundial.

A continuación, dirígete a la avenida de los Campos Elíseos, también conocida como la "avenida más hermosa del mundo". Tiene una extensión de 1.910 metros, encontrarás muchas marcas de lujo como Louis Vuitton, Cartier y Guerlain. Es un buen momento para ir de compras o una sesión de fotos, eso sí, prepara la cartera. Al final de la avenida encontrarás la Plaza de la Concordia, la más grande de la ciudad. Con mucha historia, fue el lugar de grandes reuniones durante la Revolución Francesa. Hoy en día, es el hogar del Obelisco de Luxor, un monolito de 23 metros de altura donado por Egipto en reconocimiento del papel de Champollion, que fue el primero en traducir jeroglíficos.

En la misma plaza, se encuentra la entrada al Jardín de las Tullerías. Este jardín francés está declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Aprovecha para tomar un descanso gourmet en la cafetería Angelina, una famosa sala de té ubicada en 226 rue de Rivoli.

A continuación, dirígete a la calle de Castiglione hasta la lujosa plaza Vendéme. Alberga numerosas mansiones, el Hotel Ritz y joyerías de alta gama. En el centro se encuentra la columna Vendéme construida en 1810, derribada por los comuneros y luego reconstruida. Continúa por la Rue de la Paix, llegarás a la imponente Opera Garnier. A continuación, camina a lo largo del edificio para llegar a otro punto de referencia de la capital, Boulevard Haussmann con sus grandes almacenes como las Galerías Lafayette. No dudes en aprovechar la oportunidad para comprar algunos recuerdos de su fin de semana en París.

Por la noche, después de este ajetreado día, te recomendamos relajarte durante un crucero Boats Flies con embarque en el Pont de l’Alma. Ofrece dos paquetes de cena a través del río Sena con una duración de 2 horas y 15 minutos, dirigidos por músicos profesionales. Estarás cómodamente sentado en una de las mesas situadas en el borde de la ventana de la bahía y tendrás la oportunidad de admirar los monumentos más bellos de París y sus luces.

Por último, para terminar la velada de una manera original, no te puedes perder la Torre Eiffel, que se encuentra a 10 minutos caminando. Un momento mágico, adornado con sus luces centelleantes tan pronto como cae la noche.

Día 2 en París

Para este segundo día en París, la visita al Museo del Louvre es una visita obligatoria. El museo alberga miles de obras expuestas en más de 60.000 metros cuadrados. Descubrirás salas de exposiciones para todos los gustos: arte oriental, egipcio, griego, romano, así como arte occidental desde la Edad Media hasta 1848. En la entrada del palacio, la pirámide de cristal es un lugar que no te puedes perder.

Después de una visita al Museo del Louvre, dirígete a la Isla de la Cité, una isla en el Sena. Es conocida como la antigua cuna de París. Comienza con una visita a la elegante Sainte-Chapelle. Construido a petición de San Luis, alberga la Corona de Espinas, una pieza de la Verdadera Cruz y reliquias de la Pasión de Cristo. En la otra mitad de la isla te estará esperando la famosa catedral de Notre-Dame de París, la catedral de la Arquidiócesis Católica de París.

Después de los tours, recorre el Barrio Latino de París, donde se encuentra la Sorbona, un edificio universitario histórico. A pocos pasos, el Panteón rinde homenaje a grandes figuras que han marcado la historia de Francia. Su arquitectura, inscripciones, símbolos y decoración reflejan la construcción de la nación francesa.

A unos cien metros del Panteón se encuentra la entrada al jardín de Luxemburgo. Este jardín privado, dependiente del Senado, abierto al público, alberga más de un centenar de estatuas, fuentes y esculturas. A menudo se organizan exposiciones de fotografía y/o actividades deportivas.

Montmartre es el último barrio que te recomendamos durante el fin de semana en París. En la parte superior del montículo, pasea por la Place du Tertre, la de los grandes pintores, pero también la Basílica del Sagrado Corazón, un importante edificio religioso parisino que atrae a millones de peregrinos cada año.

Al final del día, ¿por qué no pruebas una noche en el Moulin Rouge, al pie del montículo de Montmartre? Te sorprenderás por su decoración Belle Epoque.